Así resulta cuando las cosas se llevan a cabo sin planeación y con el simple afán de “tratar” de cumplir.
En las últimas semanas se ha presentado en San Francisco del Rincón varios proyectos que definitivamente no se ejecutarán en su totalidad en esta administración, lo que no es precisamente ninguna novedad, porque así ha ocurrido en otras administraciones.
Lo que raya en lo absurdo es el hecho de que anuncian las campañas y proyectos millonarios como si fueran acciones propias del municipio y peor aún, como si fueran un hecho.
Nuevos semáforos ¿para cuándo?
Como fue el caso de la semaforización, que se anunció con bombo y platillo y que según el director de Seguridad Ciudadana, era un hecho que daría inicio en el mes de agosto. Resulta que ni se arreglan los semáforos, ni comenzó el millonario proyecto, y lo peor de todo es que se le trata de cuestionar al respecto y no tiene tiempo de atender a la prensa, ni siquiera en las mañaneras de seguridad.
Además se ha anunciado un plan de acción para la rehabilitación de espacios públicos, que suena igual de ambicioso y que se dijo ya comenzó en la colonia Ex Haciendas, ojalá sea apegado al proyecto que se mostró y no “como se vaya acomodando”, como ocurrió con la banqueta para el Ojo de Agua, que no cumple con el proyecto como estable el IMPLAN y que tenía que adherirse al diseño de Camino Viejo.
Y que conste que nadie dice que las obras sean malas, sino que no se tiene planeación, ni congruencia en el planteamiento de las mismas.
Sería bueno que el alcalde Antonio Marún hiciera una encuesta, por su cuenta, y no manipulada por sus allegados… para saber el sentir de la gente con la apertura a diestra y siniestra de calles: sin aviso previo, sin considerar el comercio, o la estructura de las viviendas (pregúntele a los vecinos de la calle Hidalgo), y sin planear las vías alternas, lo que solo genera caos.