En el marco del 20 de marzo Día Internacional de la Felicidad, la Psicóloga Ma. De Lourdes Patiño Barba, docente de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad De La Salle Bajío compartió los beneficios que tiene el hecho de ser felices.
En primer lugar, la experta explicó que la felicidad es algo que frecuentemente se desea y se puede apreciar en las felicitaciones de cumpleaños, en los mensajes de año nuevo, las despedidas, esperanzas para nuevos comienzos, etc.
“Ser feliz es una aspiración que nos acompaña casi todos los días de la vida. También es un derecho universal. Por ello, la Organización de las Naciones Unidas declaró 2012 como el año de la felicidad.
A partir del 2013, cada año se conmemora los días como hoy, 20 de marzo, para destacar la importancia que tiene la felicidad como parte integral del desarrollo y bienestar de todas las personas de cualquier edad”, manifestó la docente Lasallista.
Añadió que la investigación psicológica sobre la felicidad ha venido creciendo en las últimas tres décadas. Ahora se sabe con base en evidencia científica, cuáles factores aportan bienestar mental y emocional, ese sentimiento al que se le llama coloquialmente felicidad.
Afirmó que como en muchas otras cosas en la vida, saber cuáles son y cómo ocurren esos factores permite poner manos y mentes en el asunto.
“No en todas las culturas se entiende la felicidad de la misma manera: en aquellas que tienen como valor central la individualidad, hay más preocupación por la autoestima y los sentimientos personales, que por la armonía grupal; en ellas la felicidad es una tarea individual.
Otras culturas valoran más las experiencias espirituales de “baja excitación” y asocian la felicidad a sentir serenidad y calma o se aprecian más las emociones de “alta excitación” y la felicidad se vive con alboroto y entusiasmo».
Explicó que, en algunas culturas se estimula la expresión de felicidad con risas y sonrisas; en otras se prefiere vivir los momentos felices manera sólo personal, como serena contemplación.
Como todo lo humano, aún en una misma cultura cada persona va construyendo sus propios significados. Así, seguramente conocemos personas que viven y buscan la felicidad de distintas maneras, incluso con características de otras culturas.
La experta compartió que la ciencia de la felicidad ha mostrado que la genética de una persona la hace más o menos propensa a sentirse feliz.
“Sonja Lyubomirsky, psicóloga e investigadora de la Universidad de California, afirma que la propensión genética constituye alrededor del 50% del nivel de la felicidad duradera de cada persona, las circunstancias (favorables o desfavorables) influyen sólo un 10%.
El restante 40% corresponde al margen de maniobra que tenemos posibilidad de cambiar con nuestras acciones; podría parecer poco el que no tengamos posibilidad de cambiar el 60% de lo que influye en nuestra felicidad duradera; pero es un poderoso 40%, razonable y realista, que corresponde a las actividades deliberadas con las que podemos incrementar nuestro bienestar emocional”.
A pesar de las diferencias culturales y personales, la ciencia de la felicidad ha aportado pautas que ayudan a labrar una vida con bienestar emocional mediante una mezcla de estrategias “a elegir” por cada quien, de acuerdo con el propio significado que se tenga de felicidad.
Finalmente, la docente Lasallista compartió algunas estrategias identificadas por la ciencia psicológica, para incrementar la felicidad de manera deliberada todos los días, enfocadas a cambiar patrones de pensamiento y de comportamiento: fortalecer las relaciones con otras personas, principalmente con aquellas que son las más significativas en tu vida; disfrutar el tiempo con los demás, no sólo con la familia, amigas y amigos.
“También, da bienestar el conversar y disfrutar el momento aún con personas desconocidas con quienes compartimos fugazmente tiempo en la fila del supermercado, en el trayecto del autobús, o en la plática ocasional con algún vecino; expresar gratitud diariamente, ya sea a las personas o a la vida; darnos un espacio para agradecer lo bueno de una relación o del día, nos ayuda a centrarnos en lo positivo”.
Adicionalmente, el imaginar el futuro con optimismo, sin ingenuidad, pero esperando y estando atentos a circunstancias positivas, oportunidades y beneficios, también fomenta la felicidad.
También, la experta invitó a disfrutar y saborear al menos un momento al día; “en el actual estilo de vida las prisas y las exigencias múltiples de nuestros distintos roles a veces conducen a vivir la vida como una carrera contra el tiempo, sin disfrutar los momentos cotidianos de alegría”.
El último consejo que compartió la Psic. Patiño fue comprometerse con objetivos y ambiciones para toda la vida; afirmó que estos pueden ser distintos para cada quien, pero tener proyectos que den sentido a la vida es uno de los factores más poderosos de bienestar emocional. “Únete a la promoción de la felicidad usando en redes sociales: #DiaInternacionaldelaFelicidad”, finalizó.