Cientos de personas gritaron, chillaron, aplaudieron y disfrutaron durante la función de estreno del Circo del Miedo.
Habitantes de Purísima y San Francisco del Rincón asistieron al cruce de los bulevares Las Torres y Juventino Rosas, en dónde se instaló una carpa peculiar, llena de imágenes que evocan terror y pesadillas.
La función debut, tuvo una duración de 2 horas, la cual, incluso momentos previos al inicio del espectáculo, comenzó a sumergir a los presentes en un ambiente de terror, donde las pesadillas cobran vida y seres terribles acechan.
«Bienvenidos al circo del miedo, pónganse incómodos y tengan cuidado con sus pensamientos», pronunció una voz por los altavoces al inicio de la función, las luces se apagaron y la oscuridad cubrió el lugar.
Una luz central mostró a Isabela, quien es acechada por voces y pesadillas constantes, a las cuales suplica que la dejen en paz; ellas acceden pero, con la condición de que vaya a su mundo.
Ahí conoce a Ónix, el vínculo entre el mundo de real y esta realidad de fantasía, la cual toma los pensamientos de Isabela y los vuelve pesadillas; ella decide pensar en el circo y es cuando comienza su viaje.
Los espectadores la acompañan en su travesía mientras conoce zombies capaces de soportar el peso de varias personas, muñecas vivientes que se contorsionan cual si fueran de trapo, espantapájaros tan ligeros que son capaces de columpiarse en una silla en medio del aire.
La aparición de seres como Chusalongo, Perséfone y Onix guían la historia y a la pequeña Isabela en su camino de regreso al hogar; mientras tanto el público se maravilla y contiene el aliento ante las proezas de los seres que aparecen en cada acto.
La maestría y el entrenamiento de cada uno de los actores del circo es tal, que llevan su acto más allá de lo que se cree humanamente posible; situación en la que los vemos colgar de maneras imposibles, balancearse sujetados apenas por los dedos de sus pies o manejar el fuego como si de aire se tratara.
Y cuando el público esta más relajado, más feliz o más emocionado, nos recuerdan que lo que vemos no es sólo un espectáculo, sino la travesía de Isabela por escapar de sus pesadillas ¿lo logrará?
Si es de las personas que creen que el circo está muerto y ya no tiene nada por ofrecer, le invito a asistir, ya que el Circo del Miedo tiene una propuesta distinta a la convencional, con la cual se brinda un rato de diversión y entretenimiento a los asistentes.
Al finalizar, los asistentes pudieron convivir unos minutos con los actores, así como tomarse algunas fotos; sin duda una noche memorable.
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