Los gastos hormiga son esta serie de amenazas invisibles que por falta de cuidado o por simple comodidad, llegamos a permitir y que a la larga pueden traer consecuencias desagradables a tu cartera, ya que ‘se comen’ tu dinero casi sin que lo notes, por lo que a la larga puede llegar a significar una pérdida significativa que bien podría haberse destinado a cosas mucho más productivas o al ahorro.

Para ayudarte a reconocer estos gastos, te mostramos algunos de los principales gastos hormiga:

  • Pagos a meses: Aunque algunas tiendas departamentales dividen el precio entre el número de pagos, los productos cuestan más que si se pagan de contado. Asegúrate que el precio no incluya intereses.
  • Objetos que duran menos que los pagos: Nunca gastes en objetos que se deprecien o simplemente se gasten mucho antes de que tu termines de pagarlos, o peor, que termines por no utilizar.
  • Chequera: La tendencia hacia las transferencias electrónicas ha hecho que algunos bancos cobren una comisión por no tener un mínimo exigido para la cuenta de cheques.
  • Comisiones de tarjetas de crédito o débito: Son diversas por no realizar tu pago a tiempo, reposición de tarjeta en caso de robo o extravío, por disposiciones de efectivo de la tarjeta. Además, los bancos pueden cobrarte por disponer de dinero en cajero automático si utilizas los que no son de tu institución financiera.
  • Ventanillas bancarias: Los servicios (teléfono, agua, tv, luz, etc.) que pagues en ventanilla, suelen incluir una comisión. Una opción es pagar directo en las cajas de los comercios que reciban estos pagos, domiciliarlos o pagarlos por medio de banca electrónica.
  • Pago por servicios: Spotify, Netflix, aplicaciones, juegos, suscripciones a revistas, eventos prepagados, etc. No decimos que estos servicios sean completamente innecesarios, pero si lo que quieres es ahorrar o tener más capital a largo plazo, es muy importante dar prioridad a los que son indispensables de los que son mero divertimento.
  • Snacks o compras de impulso: Como su nombre lo dice, son compras que no entran dentro de los presupuestado y que son gastadas más por emoción que por razón.

Realizar un registro de tus ingresos y egresos personales ayuda a mantener el equilibrio financiero y mandar tu dinero del gasto hormiga al cochinito ¡evitan caer en estos gastos silenciosos! Recuerda que el seguimiento y la constancia son la llave del éxito económico.