Con más de medio siglo de pasión y amor a la música, así como un legado artístico que persiste a 12 años de su muerte, Ramón Rafael Ramírez fue reconocido por la disquera Mussart en la ciudad de León.
Sus hijos, nietos y bisnietos recibieron en su nombre el disco de platino que celebra la vida y trayectoria del fundador de la Sonora San Francisco.
Nació en 1935, hijo de Jesús Rafael Andrade «Maestro de maestros», quien le inculcó el amor y gusto por la música; a los 13 años de edad entró como trompetista en la orquesta de su padre, llamada «De la Cruz Blanca».
Experto en el manejo de varios instrumentos, tenía la facilidad para improvisar, componer, arreglar y escribir partituras, sin una formación académica de por medio.
A los 26 años de edad, dejó a su padre y fundó junto a varios amigos la banda «Tropical San Francisco», en la cual tocaban música de diversos géneros para el disfrute del público.
Tras 5 años de trabajo, son invitados a participar en el programa Televariedades de canal 10, en la ciudad de León, Guanajuato.
El éxito es inmediato, por lo que ahora aparecen de manera semanal en el programa y a consecuencia de ello, su fama en la región crece rápidamente.
Debido a sus apariciones en la televisora leonesa, así como de su estilo de música, la población confunde su orígen y los creen originarios de León, además de cambiarles el nombre a «Sonora San Francisco».
Alrededor de sus 40 años de edad, Jesús Rafael y su agrupación habían alcanzado fama Nacional, cada fin de semana se trasladaban en su camión a diversos estados de la República, donde se presentaban ante miles de personas.
Por estos tiempos, Rafael Ramírez grabó su primer sencillo para la Discográfica AVE, de Lagos de Moreno y posteriormente trabajó con Discos Musida; alcanzando a tener un 1 disco y 3 sencillos, los cuales le hicieron acreedores a 3 discos de platino (los cuales se otorgan al alcanzar ventas superiores a las 40 mil unidades).
Mientras tanto, en su ciudad natal se desempeñó como parte importante de la vida pública, ya que de acuerdo a sus hijos, fue síndico y regidor de San Francisco del Rincón, así como representante de la ciudadanía en el Congreso del Estado.
Gracias a la amistad que entabló con múltiples músicos, bandas y radiodifusoras en el territorio Nacional, se logró que los tradicionales bailes del día 8 de diciembre tuvieran invitados de mayor alcance, fama y gusto de la ciudadanía.
Los Freddys, la Sonora Dinamita y Pérez Prado, entre otros, son algunos de los invitados con quienes compartió escenario.
Por más de 3 décadas, no sólo apoyó en la organización de los festejos de la ciudad, sino que tocó en los bailes populares y era el encargado de hacer arreglos y composiciones para invitados especiales, como los realizados al cómico Capulina, durante la coronación de la reina infantil.
Ya cerca de los 60 años de edad, Ramón Rafael Ramírez dejó el manejo del grupo a sus hijos y se retiró a la ciudad de León; donde fundó la Sonora Santa Cecilia, además de hacer arreglos y composiciones para la Sonora León y la Sonora Brillante.
Tiempo después le diagnosticaron diabetes, enfermedad que le consumió y le llevó a su muerte en el año 2007.
A su sepelio acudieron amigos y seres queridos que le conocieron durante sus 72 años de vida; actualmente se encuentra enterrado en el Panteón de San Nicolás y sus restos son visitados por admiradores y familia.
Su legado continua en la forma de sus composiciones y arreglas más famosos: «El botecito», «Payo», «San Fernando», «Jacinta y José», «Número 100», así como composiciones originales en resguardo de su familia.
En reconocimiento a esta vida dedicada a la música, es que David Moreno Fajardini, de la disquera Mussart entregó el disco de platino a sus descendientes, que al día de hoy se contabilizan en 10 hijos, 26 nietos y 30 bisnietos.