El municipio de Dolores Hidalgo, Cuna de la Independencia de México, posee un gran valor y relevancia para nuestro país y el mundo, no solo porque ahí se dio el Grito de Dolores el 16 de septiembre de 1810, también por ser el hogar de talentosos artesanos que trabajan la cerámica de una manera única y tradicional.
Hoy más que nunca, su talento es reconocido alrededor del mundo, gracias a productos de calidad, diferenciación y hechos a mano.
“Independientemente de la situación que se ha atravesado desde el año pasado con el COVID, con la pandemia, es importante reconocer que muchos sectores o varios sectores de Guanajuato han experimentado un crecimiento interesante en sus exportaciones, un caso muy particular es el sector de artesanía y en especial lo relacionado a la cerámica tipo Talavera”, dijo Luis Ernesto Rojas Ávila, Director General de COFOCE.
De acuerdo a estimaciones de la Coordinadora de Fomento al Comercio Exterior de Guanajuato, con información de la Administración General de Aduanas, SAT, de enero a noviembre del 2020, el sector artesanías de Guanajuato exportó más 11.4 MDD.
Si hablamos solo del crecimiento de las exportaciones de cerámica los números son inspiradores: en el mismo periodo (ene-nov) durante 2019 se vendieron más de $7MDD de productos, mientras que en 2020 las exportaciones fueron por $8.4MDD.
Proyecto Cuna de Arcilla
Ante este incremento acelerado y al detectar áreas de oportunidad en el mercado, es que surge la idea del proyecto “Cuna de Arcilla”, que tiene como objetivo la formación de un grupo productivo homogéneo de cerámica tipo talavera para surtir órdenes de alto volumen para exportación a través de Grupo Castillo, reactivando el trabajo y economía de empresas PyME del sector Cerámico de Guanajuato.
“Nosotros como empresa, como Grupo Castillo, tenemos más de 25 años exportando nuestros productos; actualmente estamos en Canadá, Estados Unidos, estamos en América latina y en algunas partes de Europa. Sin embargo, la demanda que estamos teniendo hoy por hoy nos ha rebasado, y creemos firmemente que hoy es el momento de poder integrar a otras empresas que tengan el compromiso y la calidad para poder exportar”, destacó Rocío Castillo, Directora General.
Semillero de empleos
Cuna de arcilla no nace de la noche a la mañana; fueron meses de arduo trabajo en donde los artistas dialogaron, definieron objetivos y lograron sumar esfuerzos para construir el proyecto en conjunto.
Actualmente está conformado por 11 empresas y más de 500 colaboradores que buscan dar ese salto a la exportación de sus productos.
“A este gran proyecto estamos sumando a algunas empresas y talleres de San Felipe, Guanajuato, en el cual nos emociona muchísimo que formen parte de este gran proyecto empresas que nunca habían exportado y bueno actualmente los estamos capacitando para que formen un gran papel de cuestión de la calidad y que sean una cadena de valor para este gran proyecto”.
Desde el inicio, COFOCE ha sido un aliado para el desarrollo del proyecto, ayudando en su conformación y orientándolos sobre el mejor camino hacia la exportación.
“COFOCE es una institución sumamente importante para el desarrollo y el crecimiento de nuestras empresas el cual hemos caminado por más de 25 años juntos y nos ha apoyado en todos los proyectos de exportación que hemos tenido, este no es la excepción. Actualmente nos está ayudando para poder colocar las bases y poder entrar todos en un mismo espacio, además nos está ayudando en la búsqueda y desarrollo de estos talleres que tienen la calidad, que tienen el compromiso y la seriedad para poder entrar a este gran proyecto”, reconoció la empresaria.
Enaltece a los artesanos
Cuna de Arcilla surge para fortalecer a los artistas, darles la oportunidad de crecimiento y que sus productos sean apreciados en el mundo.
“Y si me preguntan ¿qué me gustaría que sucediera con este proyecto Cuna de Arcilla?, pues sin duda lo primero es el desarrollo y el crecimiento con bases firmes para que este proyecto pueda tener una relación comercial durante muchos años. Después, me gustaría que se integrará un número importante de empresas a este proyecto; estoy convencida que estas empresas que se puedan integrar van a tener mayores herramientas, mayor capacidad, mayor conocimiento en diferentes temas, ya sea hacia al interior de la empresa y hacia los temas de exportación”, puntualizó Rocío Castillo.
Dijo que las claves para que el proyecto sea todo un éxito y puedan tener una relación comercial internacional duradera son: el compromiso, la seriedad y la honestidad que pongan todos los involucrados al proyecto y por supuesto, la calidad de sus productos.
El proyecto Cuna de Arcilla ha logrado tanto éxito que actualmente no recibe pedidos pues tiene órdenes de compra hasta julio del 2021; por ello, se trabaja en conjunto, artesanos y COFOCE, para poder incrementar la capacidad productiva y recibir más pedidos del extranjero.
Impulsar el talento
Luis Ernesto Rojas Ávila, Director General de COFOCE destacó que la Coordinadora es un gran aliado de este tipo de proyectos que dignifican la labor de los artesanos.
Por ello, ayudarán a Cuna de Arcilla en la vinculación de un mayor número de talleres que buscan la exportación, tejiendo estrategias que den a sus productos formalidad y un valor agregado.
“En este caso todas las variables se han estado conjugando y por supuesto de aquí van a emanar empresas que en el mediano o en el largo plazo van a poder ya de manera directa estar exportando y bien va a ver algunos otros talleres que si bien no van a estar exportando de forma directa, van estar vinculadas a una comercializadora, a un gran cliente a los Estados Unidos o Canadá, o bien a través de una plataforma de Marketplace”, destacó el Director General.
Al final de este proyecto se espera la generación de más de 30 nuevas empresas exportadoras.