La tradición de la Quema de Brujas, símbolo de identidad para los francorrinconeses, fue proclamada como patrimonio histórico, cultural y artístico de la ciudad de Purísima de Bustos.
Esto después del descubrimiento de un texto histórico en el que se asegura que la tradición surgió en Purísima el mismo año de su fundación en 1603, cuando era una aldea de labriegos pero, que fue olvidada cuando se fundó la ciudad de Nuestra señora de la Limpia Concepción en 1649.
Para corroborar la veracidad de este texto, el cual fue escrito por Don Atanasio Guerrero, expertos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), dedicaron más de 10 años de investigación.
«Fue un proceso complicado, no sólo tuvimos que corroborar que la letra fuera idéntica a la del ex alcalde, sino que además tuvimos que investigar sobre las costumbres de los habitantes de San Juan del Bosque, los cuales quemaban brujas de palma para evitar desgracias en sus campos y ganados», señaló Inocencia Bustos Guerrero, investigadora del INAH.
Autoridades tuvieron una tensa reunión de trabajo, en la que ambos municipios acordaron realizar la Quema de Brujas durante sus aniversarios, así como su inclusión en festejos como la feria del municipio o durante las noches Mágicas en Jalpa de Cánovas.
“Inocente palomita que te dejaste engañar sabiendo que en este día en nadie debes confiar”