Hoy les quiero platicar sobre un tema del que creo que pocos o muy pocos han hablado, y es sobre los hobbies o pasatiempos.
Hemos escuchado que muchas personas realizan ciertas actividades para romper con el esquema de la rutina, otras personas ponemos de pretexto que no tenemos el tiempo para poder hacerlo o que simplemente llegamos muy cansados como para hacer otras actividades que no tenga que ver nada con el trabajo o la familia.
También está el otro esquema en que las los adultos atiborramos de actividades por la tarde a los más pequeños con el fin que tengan «algo que hacer», lo cual deja una puerta en la que también el niño deja de tener cierta vida por estar cumpliendo una serie de actividades físicas o mentales en la tarde que no lo deja disfrutar propiamente de su niñez, creo yo que son los casos más comunes que en sociedad vivimos.
Algunos pasatiempos pueden ser caros lo cual es cierto pero, todo depende del pasatiempo que se quiera trabajar.
Entre las múltiples disciplinas que hoy en día he practicado son: la danza, coro y teatro, aún no he intentado la música pero, hay uno en lo particular que me anime a experimentar y es el de dibujar mandalas.
Creo yo que todos hemos visto en el puesto de revistas esos famosos libros de mandalas, donde te incitan a través de una serie de figuras que repiten un patrón y que tienes que empezar a darle la forma o el color, para que al final la figura se vea lo más armoniosa posible.
El verdadero sentido de los mandalas no es que los dibujes a la perfección, si no es una invitación a adentrarte a ti mismo, es un momento de concentración, inclusive relajación, dónde puede provocar una reflexión en la persona.
Yo en un principio era muy incrédula de este famosa actividad, pero ya estoy muy asombrada por por todo lo que influyó en mi persona, tan solo de hacer uno.
Definitivamente creo que es una actividad que que si tienes familia o no tienes familia puedes hacerla, creo que en familia es mucho más enriquecedor puesto que tiene niveles de dificultad, inclusive en el dibujar los mandalas invita a la familia a observar, escuchar y a admirar el trabajo de los demás y es un trabajo que te invita la concentración y busca precisamente buscar ese espacio contigo mismo. que es el fin de un pasatiempo tener un tiempo para ti.
Yo sé que hoy en día las actividades del mundo demanda mucho de la persona en muchos sentidos pero sin embargo creo que también estamos viendo muchos casos donde la gente se está enfermando de forma crónica a falta de estos pasatiempos, por no querer salir de la rutina y buscar un espacio con uno mismo.
Vale la pena adentrarse en actividades que fomenten nuestro desarrollo artístico, emocional y espiritual y que muchas veces dejamos de lado o no le damos la prioridad que se merece. Probemos actividades en que nos ayuden a salir de la rutina.aunque sea una hora a las semana.
¿Qué pasatiempos tienes? Compártelo con la comunidad.
La tarea no es fácil pero ya saben lo que dicen: «La práctica hace al maestro».