¿Por qué otras personas son más exitosas en su vida personal y laboral? ¿Será que nacieron con un talento especial?  La gente constantemente suele sentirse intrigada cuando ve que suceden cosas buenas en las vidas de otras personas, y en más de una ocasión se atribuyen los éxitos ajenos a fuerzas que van más allá de nuestro control, cuando la realidad es que las únicas diferencias son los hábitos que adoptamos en nuestras vidas. Para dar un poco más de luz sobre el tema, te presentamos los 7 hábitos de las personas altamente efectivas:

  1. Se proactivo- Tomar la iniciativa no significa ser insistente, molesto o agresivo, significa reconocer nuestra responsabilidad de hacer que las cosas sucedan, prestando atención a tu lenguaje y al lenguaje que te rodean y tomando acción.
  2. Comienza con un objetivo- Empezar con un fin en mente significa comenzar con una clara comprensión de su destino, saber a dónde se está yendo, de modo que puedas comprender mejor dónde estás y dar siempre los pasos adecuados en la dirección correcta. Para ello, visualiza siempre tus objetivos y tomate un momento todos los días para saber cuáles son tus nuevos retos.
  3. Prioriza- Esta es la capacidad para tomar decisiones, elegir y después actuar en consecuencia. Para ello, afronta las actividades más difíciles al iniciar el día, así te podrás liberar y continuar con un día más productivo.
  4. Busca siempre el Ganar-Ganar- No se trata de tu éxito o el mío, sino de un éxito mejor para ambas partes. Ver la vida como un escenario cooperativo, no competitivo, significa que los acuerdos o soluciones son mutuamente benéficos, mutuamente satisfactorios en donde todas las partes se sienten bien por la decisión que se tome y se comprometen con un plan de acción.
  5. Entiende primero-  Ante los problemas tenemos la tendencia de precipitarnos, a arreglar o juzgar las cosas antes de comprender profundamente el problema. Antes de actuar o crear un juicio, investiga, piensa y analiza la situación.
  6. Sinergia- Cooperar, coordinar, estar en la misma sincronía o simplemente trabajar en equipo; todas estas son las cualidades de la sinergia. Recuerda, cuando te encuentres en una situación complicada, ten presente que dos cabezas piensan mejor que una.
  7. Adopta el concepto de cambio- Si algo de cierto hay en el mundo, es que éste siempre cambia. Para estar a tono, cuestiona el mundo que te rodea y aprende a fluir con los cambios, para ello es importante aprender a renovarte, a aceptar lo que nos rodea y a actuar conforme a lo que se tiene.

 

Somos lo que repetidamente hacemos. La excelencia, por lo tanto, no es un acto sino un hábito. – Aristóteles