El tabaquismo pasivo, es decir, los menores que viven con adultos fumadores tienen un alto riesgo de padecer otitis media en una fase aguda, ya que el estar expuestos al  humo del cigarro disminuye la movilidad de la mucosidad en oído y senos paranasales.

La otitis media se caracteriza por la inflamación del oído medio que se presenta en la mucosa del mismo.  Puede producirse en uno o ambos oídos al mismo tiempo, o dividirse, según el tiempo podría ser aguda y crónica.

Se desarrolla principalmente en niños y niñas, y a lo largo podría generar secuelas importantes.

“La causa principal del desarrollo de la otitis media aguda es la infección de vías respiratorias superiores que no fue tratada adecuadamente como catarro o tos que se complican hasta la inflamación del oído presentándose pus y dolor intenso”, explicó Claudia Olvera, otorrinolaringóloga de la Unidad Médica de Alta Especialidad No. 1, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

Al referirse a los síntomas del padecimiento, la doctora Olvera dijo que son: llanto e irritación, pérdida de audición, fiebre, drenaje del oído, náusea, vómito, dejar de comer y agarrarse el oído.  

Indicó que la otitis media aguda puede prevenirse, además de no exponer a los menores al tabaquismo, procurando la lactancia materna y con revisiones periódicas con el pediatra.

Cuando esta enfermedad se vuelve crónica puede llegar a dañar la audición y evolucionar hasta dejar sin función a este vital sentido, por lo que la especialista del Seguro Social recomendó a la población evitar utilizar remedios caseros para no agravar la situación.