Dónde estás papá? ¿Dónde estás mamá?

En la escuela, en la casa, en la mesa, brilla alguien por su ausencia y no me refiero a aquellos que se fueron de esta Tierra, sino de aquellos que siguen vivos y están ausentes por diversas causas… muchas de ellas, ajenas a ellos.

Excélsior publica que 53% de los mexicanos siente que creció con un padre ausente. En 1995, 31% de casas carecía de este integrante cifra que aumentó a 41.5% en 2008. Para 2010, 21 millones de papás mexicanos vivían solos con sus hijos; 20 millones con su pareja e hijos, 259 mil se registraron divorciados y 495 mil, viudos.

En México, ser padre no sólo implica proveer bienes o servicios, también se convierte en una imagen borrosa relacionada, muy a menudo, con el concepto “ausencia”.

Es una realidad que cada vez va ir incrementando debido que los giros económicos del país ha orillado a ambos padres trabajar y si éstos tienen hijos, implicará que ya no podrán pasar tiempo con ellos. Todo con la finalidad de proveerles lo que necesiten, además de tener que cubrir gastos de la casa o enfermedades.

Esto implica que los hijos crecen sin una figura de autoridad y sin el acompañamiento emocional que deberían de tener.

En el aula perfectamente, sin importar la clase social, se percibe cuando un alumno tiene acompañamiento en casa. Ojo, quiero aclarar que uno piensa que como padre es estar desvivido. Conozco padres que ambos trabajan y le dedican el tiempo de calidad suficiente para estar con sus hijos y los hijos, tienen buen rendimiento escolar.

También sé de casos en los que los padres no están al pendiente de sus hijos o creen que por estar todo el día junto a ello es igual a calidad y la triste verdad es que no es así y son los que tiene un menor rendimiento.

Es importante que los padres o tutores de HOY, reconozcan que pasar todo el tiempo con los hijos, no siempre es igual a calidad. Así como no pasar tiempo con ellos, es igual de perjudicial.

Entonces ustedes dirán, ¿qué es lo que se tiene que hacer? En otros momentos se ha platicado, que por muy ocupados que se estén, búsquense un tiempo para poder estar al 100% (1 o 2 horas) sin celular, sin pendientes de trabajo, solo tiempo para escuchar, escuchar y escuchar  y dar afecto.

Busquen un juego de mesa.

Una tarde para comer en casa.

Una película en casa.

Hacer una comida juntos.

Una platica  en la hora de la comida.

Compártenos: ¿Qué haces en tu familia para pasar tiempo de calidad?

El formar una familia, no es tarea fácil, es un compromiso de día con día. Pero recuerda: «La práctica hace al maestro.